- Este es nuestro queso más natural, ya que al no estar pasteurizado conserva todas las propiedades de la leche. Su textura es semi dura, tiene ojos en la pasta y en boca deja un regusto picante y una ligera acidez con notas florales y especias. Lo mejor es que como el sabor de cada queso depende de la alimentación de las cabras, la experiencia siempre es diferente.
- Estás ante un queso único donde hemos logrado un equilibrio entre su aroma, que mezcla leche y notas picantes, y un elegante recuerdo a frutos secos en el paladar. Corta un par de triángulos y acompáñalo con un buen vino tinto o rállalo en la pasta y disfruta de su inconfundible sabor.
- Nuestro queso semicurado, ganador del primer Premio Nacional, tiene una textura media y un sabor en boca que gusta a todos. Pruébalo antes de comer con un buen vino blanco y unos picos de pan o con cervecitas y almendras saladas, o simplemente rállalo y le dará un toque especial a todos tus platos.
- Este queso semicurado de textura suave y regusto a pimentón debe consumirse a temperatura ambiente para apreciar todo el sabor de la especia. Es ideal para darle un toque de color a tus tablas de quesos acompañado de un buen vino tinto y frutos secos.
- Envuelta en una capa de manteca de cerdo ibérico, su corteza natural comestible recoge todo su sabor junto con el aroma fresco del romero. Un queso ideal para acompañar de vinos tintos y panes artesanales al gusto que potencien todo su abanico de matices en la boca.
- Nuestro queso viejo está muy solicitado, tanto que muchas veces hasta se agota. Gusta mucho porque hemos logrado un sabor único y una textura que se desmorona al cortarlo, añadiendo sensaciones que invitan a degustarlo. Es tan personal que puedes tomarlo solo o acompañado de tu vino favorito.