En los picos de Urbión (Soria), junto a bosques donde se recolectan trufas y hongos, se crían estos patos de forma natural al aire libre, con una cuidada alimentación basada en maíz. El sello Tierra de Sabor que otorga la Junta de Castilla y León a los productos de calidad diferenciada, avala la calidad de estas elaboraciones.